Ya queda un mes para que acabe esta etapa estacional llena de cambios, tanto físicos como psicológicos.
El término prima proviene de primer, y vera de verdor, donde en las ramas de los árboles comienzan a brotar las hojas verdes, donde las flores comienzan a salir mostrándonos sus colores vivos.
Es, quizás, una de las cuatro estaciones más complicada. Comienza el período de polinización, floración y cuaje en plantas y árboles frutales. Esto conlleva a que el polen se encuentre más intensificado en el ambiente y aparezcan las famosas alergias primaverales.
Estas alergias causan una sintomatología física que se puede volver algo insoportable en esta época del año para aquellas personas que la padecen: picor de nariz, moqueo, cansancio, sensación de ahogo.
Pero además, la primavera trae consigo un estado anímico difícil de entender o tratar: la astenia primaveral. Todos hemos llegado a escuchar que "la primavera, la sangre altera", debido a que hemos pasado de una estación fría, triste, como es el invierno, a una más cálida, donde todo empieza a coger color, en la cual ya podemos disfrutar del aire libre, tumbarnos en un césped o en la playa a disfrutar del sol. El estado anímico se levanta, hemos cambiado las tristes tardes de lluvia en casa a las tardes cálidas en parques o en el campo. Pero no todo es tan bonito.
Para algunas personas la primavera supone un cambio brusco, se les plantea un desequilibrio emocional debido a este cambio: el paso del frío al calor, de los días tristes a los alegres, paso de los colores grises a los cálidos,vuelta de los colores vivos. Se agudiza la ansiedad, el malestar físico de las alergias y se intensifica el estado de soledad (en este caso, la sangre altera pero a negativo).
La astenia primaveral no es algo que los médicos diagnostiquen, no es una serie de síntomas en las que se pueda prescribir una serie de medicación. Es algo a lo que nosotros mismos debemos hacer frente. Para quien la sufre, debe conocer qué hacer al respecto. No se debe dejar llevar por una depresión, y autoconvencerse de que con medicación, ya sea antidepresivos o ansiolíticos, se le pasará. Debe cambiar su estado de vida amoldándose a esta etapa que tan difícil le resulta afrontar. Terapias de grupo, un cambio en el hogar, pueden ser algunas de las mejoras para poder sobrevivir a esta estación del año, que, mientras para unos es una etapa de felicidad, amor, alegría...para otros es una tortura.
No puedes detener la primavera, pero la puedes aprovechar al máximo
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